viernes, 29 de octubre de 2021

Repoblación

Dirías que vivo en el campo pero me callan
los anillos serpentinos de las autovías y su azabache.
En el zumbido de tumor de las radiales
encuentro todos los caminos bloqueados.

Hay un vertido de lodos urbanos
en los campos que nos rodean.

Hay no obstante un olmo, extraño fénix,
renacido y poderoso partiendo
una colina de viejos cascotes.

Aquí hemos plantado encinas y coscojas,
hemos desovado sus brotes en lugares sin futuro;
cambia la estación en un abrir y cerrar de ojos:
la bellota que pierde su armadura
es una pequeña roca de Sísifo.

Por más retoños que plante
no consigo comprender el invierno;
por más plantones que siembre
no consigo aliviar mi culpa,
imposible limpiar su peso
y construirse un perdón con la azada.

No tiene espacio a mi lado el hipócrita
que se declara neutral en el pausado combate
entre savia y escombro.
Bien lo sabe el viajero sin prisa:
es imposible pagar la deuda que tenemos
con los árboles, las fuentes y los manantiales.

El mundo torna a sombra pero sin bosque.

Qué gota de esperma turbio acudió
a fecundar esta pobre tierra,
tan lascivo en su cruzar el cosmos
para quebrar la membrana
de este óvulo casual
y llenarlo de gente y acero.

Me niego a escuchar,
me niego a aprender,
me niego a prestar atención
a su lenguaje de mandíbulas
que parten huesos,
que desnudan raíces al sol cruel.



jueves, 21 de octubre de 2021

Bailaora en la periferia

Sentirse adolescente y anciano al mismo tiempo,

sentir que el tiempo está en tu mano pero no bajo control,

sentir que eres una maderita agitada por las olas del reloj,

marejada sin rumbo pero inexorable.

En la periferia una bailaora flamenca

se caga y taconea sobre el fútbol.

Las nubes parecen gatos

tumbados en mesas de cristal.
Me sudan los codos cuando la brisa nos abandona.

Madrid se ve limpia a la distancia en días de viento intenso,

así que espero al huracán que una noche limpie todo. 

Me desmonto desmontando a Sorrentino,
se me saltan las lágrimas con el suicidio de Steiner,

me invade el anhelo de chupar tractores

en cada pueblo bullendo de niños y ovejas.

Conservo con celo la rabia resignada

de no poder capturar los versos de cada noche de insomnio.
Queda el consuelo de que todo error sea algo perfecto,

un proceso casual y exacto, imposible de mejora,

insuperable y natural en su catástrofe.

 

 

 

martes, 19 de octubre de 2021

Tengo ganas de estrellas y relojes

Estoy triste, triste como una roca
que lleva millones de años viendo
la fortuna errada, el sinsentido
de los hombres.
Estoy triste porque sólo hay razones.

Nacemos partiendo en dos
a nuestra madre.
Nacemos siendo dolor.
Nuestro primer acto de agresión
es rasgar la ingle de nuestra madre.
Por eso las madres resisten cualquier marea.

Tengo ganas de estrellas y relojes
a destiempo con la luna.
Relojes que me digan que es de noche
cuando aún brilla el sol.

Déjame romper algunos espejos
déjame quemar algunas agendas
déjame borrar algunos momentos
déjame quitarme peso muerto.





martes, 12 de octubre de 2021

El trabajo me impide escuchar poesía...

El trabajo me impide escuchar poesía
cuando mis yemas se hunden en teclados.
De todos modos, qué injusto que un verso
lo aproveche igual un torturador
que una mano que empuña una semilla.

Quisiera pensar que guardamos caballos
en las bocas
que hay potros piafando impacientes
tras nuestras encías
pateando su espera a la sombra
de los dientes.

Extraño el salto de la urraca
con su rumbo de rombo,
pero sé que el hombre envidia el aullido del lobo
pues ningún sonido retrata mejor su nada,
su absurdo humano.

Las reglas del juego las dicta
gente tan rica que sólo tiene bolsillos.
Gente que acapara ruinas
para venderlas como futuro
cuando se pongan de moda.

Prefiero dormir poco para pasármelo pipa.






miércoles, 6 de octubre de 2021

Cabronías XX

Las alas de la rapaz
pueden hacer más daño
que sus garras.
....
Qué afán el del ser humano
adentrarse en océanos sin fondo
morir con la ilusión no del suicida absurdo
sino del valiente que se engaña.
....
Un cuñao con dos carreras
es un cuñao con excusas más elaboradas.
...
Certezas asumidas:
lo que no se publica no existe;
mi odio no existe si no lo aprecias;
la senda no existe
si no la guardo en una nube.
....
La reacción considera criminal
eliminar la tortura,matar por diversión;
pero la muerte de oficios milenarios
que nutren la tierra
es progreso inevitable.
....
Darse cuenta de la caída
si pronunciar “fascista”
te mete en problemas
en un pueblo de Castilla.
Otra vez.
....
Españolazos jubilados de derechas:
no fueron vuestros cojones
los que sacaron vuestra familia adelante,
sino el bloque soviético
pariendo en occidente -a la fuerza-
el estado del bienestar.
....
Al fuego fatuo del 15M acudieron las polillas
que siempre consideraron a los sindicatos
como algo del pasado;
insectos anticomunistas atraídos
por los fuegos de artificio.
La indefinición como cemento
de la nada más lesiva.
....
La gente fuma, es adicta al humo.
Lo compra con avidez,
entre lágrimas de fervorosa esperanza,
a cualquier vendedor,
aunque les lleve a una muerte
donde escupan trozos de pulmón.
....
Nos drogamos porque preferimos huir
antes que plantar cara
....
Nos escudamos en un trabajo que detestamos
para no enfrentar un mundo que aborrecemos.

domingo, 3 de octubre de 2021

Hay...

Hay un palo de lluvia

en todas las cañerías,

en todas las bajantes.

Hay una copa en cada corazón.
Hay una cueva donde esconderse

en cada currusco de pan.
Hay una mosca atrapada en mi ojo,

golpeando la córnea hasta morir.
Hay una titilante telaraña de gotas

en la noche del verano.
Hay ruinas condenadas a la nostalgia

previa al olvido

en cada plano de arquitecto.

Hay una rotunda mujer curva,

como de Fellini,

en el paso ampuloso de las palomas.
Hay un vilano ruidoso cual redoble

en cada olmo redondo

del que vuelan aleteantes gorriones.

Hay una hipocresía de cicuta

en quien espera herencias

pero no está dispuesto a la conquista.
Hay una luz al final de todo,

una luz que nadie ve, y así

una luz nacida muerta y vacía.
Hay columnas de alta tensión

suturando eléctricas

las heridas del territorio.

Hay un nudo de melodías

casual y siempre perfecto 

en las teclas negras de piano,

hay un viaje al ensueño en el salto

aleatorio de sus dedos azabache.
Hay billones de años acumulados,

biología, azar y evolución,

en la semilla muerta que dejamos
en los inodoros.

Ay, ay, ay...



viernes, 1 de octubre de 2021

Imperialismo (boceto II)

Francotirador de aceituna
oculto en un olivo
cantando con su voz de raíz
(cuando el cielo quema como lava,
cuando come carne el plomo fundido,
cuando sisea la esperanza
que se retuerce en aceite hirviendo);
gritando con esa sorpresa imposible
del niño que sangra cuando el polvo se disipa





XX  Aniversario de la muerte del niño
Muhammad Al-Durrah, bajo las balas
del terrorismo sionista